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domingo, 22 de mayo de 2011

Picasso, los moros y Blanco.


Si Picasso hubiera sido simpatizante de Franco en lugar de serlo de la República, ese famoso cuadro llamado “Guernica” se llamaría “Belchite”, porque la república también bombardeó población civil; ahí están intactos los escombros y las casas derruidas para demostrarlo. Todo es relativo.
¿Tienen razón los marroquíes cuando aseguran que España es de ellos por razones históricas? Vamos a ver...cuando entraron a hierro y fuego en el año 711, aquí existía una población hispano-romana que poseía identidad de nación bajo el gobierno visigodo y que se vio desplazada y relegada a una pequeña franja territorial en el norte de España al ser expulsada de sus tierras, exactamente igual que los judios hicieron en la década de los cuarenta y siguen haciendo con los palestinos actualmente. El siglo VIII penínsular fue una tragedia humana igual que hoy lo es Gaza y Cisjornania. Los que estamos aquí somos los descendientes de aquella población íbera que, poco a poco, fue recuperando lo que era suyo desde hacía milenios. Muy bonita la Alhambra y la Mezquita, pero a mí, personalmente, me emociona mucho más cualquier ruina de un modesto poblado íbero, en algún yacimiento perdido, que los foráneos arabescos con los que no me identifico. Esos no son de mis antepasados. Bastan unas nociones básicas de historia para decirle a Marruecos...esto no es vuestro y nunca lo ha sido.
Hoy me he sorprendido a mí mismo emocionándome con los miles de chavales manifestándose con un civismo, una organización y una actitud exquisita, en numerosas plazas de este país. Piden un cambio que les permita tener una oportunidad de conseguir un trabajo para vivir dignamente y de acceder a una vivienda y he sentido una profunda vergüenza viendo en televisión al ministro Blanco ofreciéndo a la juventud, asegurando que les importa mucho, 300 euros para ayudarles a que obtengan el carné de conducir. Muy en su línea, y tal y como están acostumbrados él y sus correligionarios, este señor sigue ofreciendo limosnas cual caramelo a un niño, mientras les roban el futuro y la esperanza a una generación entera. Oirlo y verlo ha supuesto para mí la imagen tangible del por qué de la angustia, el levantamiento y la indignación y no he podido evitar caer en la cuenta de que nuestros insignes políticos, hijos del Mayo frances del 68, han provocado un Mayo español en 2011, y espero que les reviente en las narices y los relegue al lugar ignominioso en el que les corresponde estar ya.

2 comentarios:

Antonio S. dijo...

Prácticamente, cada vez que veo las noticias en Tv, estoy renegando de los políticos en general y mucho de algunos en particular. Parece mentira que, con el potencial que creo que tenemos, estemos en la situación en que estamos, ¿cómo puede haber tanto chorizo,tanto imbécil y tanta cara dura!. Joder sólo saben llenarse los bolsillos y a los demás que le den, por Diós, si ni siquiera son capaces de viajar en clase turista, aunque sólo sea para dar ejemplo.¿Se les ve o no se les ve venir?. Yo más que indignado, estoy cabreado y con una sensación de impotencia que no debería tener. En fin, al final todos horizontales.

juanma medina dijo...

Por muy increíble que parezca, aún recuerdo, en una especie de sueño dulce y vaporoso, aquella época en la que todavía creíamos en los políticos. Aquellos de la época de la preglobalización, aquellos que nos brindaron un país lleno de derechos y avances a pesar de que no había nada perfecto. Recuerdo a Suarez dimitiendo por razones de estado y a tantas personas que con un sueldo pudieron ofrecerle estudios a sus hijos, comprar un piso y hasta tener coche. Mirar aquello y ver la miseria humana y la ineptitud que todo lo impregna me hace pensar en un dilema que siempre he tenido: ¿es peor haber nacido ciego o haber perdido la visión después de haber conocido la luz?
Estas generaciones indignadas no han conocido otra cosa que miserables y hostilidad, pero nosotros vimos la luz ¿qué sera más amargo? Saludos Antonio.